Falta poco para que el colombiano Juan Sebastián Muñoz encare su tercera edición del PGA Championship —y tercera consecutiva— y este martes tuvo un encuentro con la prensa para hablar de lo que será esta semana en elSouthern Hills Country Club (Tulsa, Oklahoma).

Junto a Joaquín Niemann y Mito Pereira, con quienes comparte casa por esta semana, Muñoz jugó nueve hoyos de práctica esta jornada ('back nine') para tener un primer contacto con este retador campo el cual visita por primera vez.

"San Francisco fue diferente a Kiawah Island y ahora también con Oklahoma. Son diferentes campos, diferentes 'fields'. Estoy emocionado por el reto y espero poder hacerlo bien", indicó Sebastián.

Constante apoyo de colombianos en el PGA Tour: "En Dallas vinieron los colombianos e hicieron ruido, en el Players también. Es divertido porque están casi en todo lado. Estoy orgulloso de traer esa afición colombiana a los torneos".

Impresiones de Southern Hills: "El 18 jugó muy largo hoy. Me gusta el campo. No hago muchas rondas de práctica, trato de estar fuera del campo antes del torneo lo más que pueda [...] Toca mantener la bola en el 'fariway' para darse chanches de birdie. Muestra que todas las partes del juego van a ser importantes. Los greenes tienen ondulaciones exageradas de los tiempos antiguos [...] Hasta ahora ninguno de los PGA Championship me ha parecido fácil y este parece que tampoco. El PGA tiene buenas canchas, buenos desafíos y esperar a ver cómo va".

Cariño del público: "Es diferente, realmente. No soy el jugador al que le gritan mucho para que firme autógrafos. Hoy recibí un par de '¡Sebastián! ¡Sebastián!'. Fue chévere ir y dar unos 15 o 17 autógrafos".

La armada latina en Tulsa: "Hoy tuvimos almuerzo Sergio (García), Jhony (Vegas), Joaco (Niemann), Carlos (Ortíz) y yo. Somos muy buenos amigos, hablamos de cosas más allá de golf. Somos competitivos entre nosotros, el que lo haga mejor va a ser objetivo del resto. Estamos mostrando buenas presentaciones y ojalá que lleguén más".

Aislado de los comentarios: "No tengo presión. No tengo redes sociales en el celular, lo borré todo. Estoy en mi burbuja y todo el mundo puede hablar lo que quiera y no me doy cuenta".