Ángel Cabrera fue extraditado este martes por la Interpol, desde Brasil a Argentina. El golfista, bicampeón de 'majors', está siendo procesado por varias causas de violencia de género.

La pandemia de Covid-19 había dificultado la repatriación de 'El Pato' Cabrera desde Brasil, donde están restringidos los vuelos hacia Argentina. Este martes fue entregado a la Policía Federal de su país en Paso de los Libres, y estará recluido en Puerto Iguazú hasta el próximo sábado, cuando será trasladado definitivamente a la cárcel de Bouwer, en Córdoba. 

La información que divulga el diario La Nación de Argentina también precisa que el pedido de detención internacional lo hizo el fiscal de Violencia Familiar de Córdoba, Cristian Griffi, quien realizó varias denuncias por violencia de género contra Cabrera.

El fiscal recurrió a Interpol porque el golfista no se presentó ante la Justicia para notificarse de un proceso de enjuiciamiento el año pasado. Tanto su expareja como su exesposa interpusieron demandan por amenazas de muerte. 

Cabrera, de 51 años, estaba prófugo de la justicia desde agosto de 2020. Llegó a Río de Janeiro el 31 de diciembre, procedente de los Estados Unidos, y afirmó que había abandonado Argentina hacía seis meses. 

Si bien cuando abandonó Argentina no tenía ningún impedimento, después fue declarado en rebeldía al no concurrir a notificarse de un proceso de enjuiciamiento ante la Cámara Segunda del Crimen, por dos causas acumuladas por violencia de género en contra: una por “lesiones leves calificadas y amenazas”, del 2017, y otra por “lesiones leves calificada y hurtos” del 2018.

En Estados Unidos jugó un torneo del PGA Tour Champions y después se operó de una lesión en un brazo. Mientras tanto manifestó a las autoridades argentinas que regresaría a su país cuando se lo permitieran las conexiones aéreas, por el coronavirus. Pero eso tampoco ocurrió. 

“Vas a terminar en el cementerio”, es una de las frases que dijo Cabrera en un video que presentó Cecilia Torres para demandarlo por presuntamente amenazarla de muerte. Silvia Rivadero también lo acusó por amenazas telefónicas.

Con victorias en el U.S. Open de 2007 y el Masters del 2009, Cabrera representa uno de los mejores golfistas de todos los tiempos proveniente de Latinoamérica.