Desde su primera edición en 1945, el Abierto de Colombia de Golf se ha consolidado como uno de los torneos más prestigiosos de América Latina. Organizado por la Federación Colombiana de Golf (Fedegolf), el evento ha sido un testigo privilegiado del desarrollo del golf profesional y amateur en el país y la región.

La idea de crear un torneo nacional surgió en medio de un panorama deportivo que empezaba a profesionalizarse en Colombia. Con el respaldo de clubes tradicionales como el Country Club de Bogotá y el Club Campestre de Medellín, el campeonato buscó desde sus inicios ofrecer un espacio competitivo de talla internacional, al tiempo que promovía el talento local.

En sus primeras décadas, el Abierto atrajo a figuras destacadas del continente, incluyendo jugadores argentinos, chilenos y peruanos, además de los mejores exponentes colombianos. Nombres como Armando Blasi, Roberto De Vicenzo y Eduardo Herrera marcaron época en el torneo, dejando huella con actuaciones memorables.

Uno de los momentos más icónicos del Abierto fue la participación del legendario Arnold Palmer, una de las figuras más influyentes del golf mundial. Su presencia en Colombia en los años 50 dejó una impresión profunda en el público y en los jóvenes golfistas, elevando el estatus del torneo a nivel internacional. Décadas después, otro grande del golf, el alemán Bernhard Langer —dos veces campeón del Masters de Augusta— también participó y dejó su sello en el certamen, confirmando la jerarquía del Abierto como punto de referencia en el calendario latinoamericano.

Con el paso del tiempo, el Abierto de Colombia se convirtió en una plataforma clave para los golfistas nacionales. Durante los años 80 y 90, el torneo vio el ascenso de jugadores como Jesús Amaya y Rafael Clavijo, quienes lograron medirse con figuras internacionales, consolidando el nivel del golf colombiano en el exterior.

El nuevo milenio trajo consigo un impulso renovado. En 2010, el torneo fue incluido en el calendario del Tour de las Américas, y más tarde en el PGA Tour Latinoamérica, lo que incrementó notablemente su visibilidad y nivel competitivo. La inclusión de golfistas de Norteamérica y Europa convirtió al Abierto en una verdadera cita global.

En ese contexto, otro campeón destacado fue el mexicano José de Jesús 'Camarón' Rodríguez, quien ganó el Abierto en 2017 y 2023.

Entre las figuras recientes que han pasado por el torneo se destacan Diego Correa y Camilo Villegas, los únicos campeones del Abierto como aficionados, en 1972 y 2001 respectivamente

La sede del torneo ha rotado a lo largo de los años, visitando emblemáticos campos de golf en Bogotá, Medellín, Cali y Bucaramanga. Esta rotación ha permitido que diferentes regiones del país se involucren activamente con el desarrollo del golf, dinamizando además el turismo deportivo.

A pesar de desafíos logísticos y económicos —y una suspensión temporal en algunos años por motivos de fuerza mayor— el Abierto ha demostrado una resiliencia notable. La Federación Colombiana de Golf ha jugado un papel fundamental en su continuidad, apostando por la formación de nuevos talentos y fortaleciendo las alianzas con entidades privadas y públicas.

En la actualidad, el Abierto de Colombia no solo es una cita obligada para los mejores golfistas del continente, sino también una vitrina para el crecimiento del deporte en Colombia. Su historia está entrelazada con la evolución del golf nacional, y continúa siendo inspiración para jóvenes promesas que sueñan con llegar al profesionalismo.

Con casi 80 años de historia, el torneo se perfila como un legado vivo del deporte colombiano. Cada edición no solo revive la tradición, sino que también mira al futuro con esperanza y ambición, en busca de nuevos capítulos dorados para el golf del país.