El palmarés de María José Marín (Farallones) se nutrió este domingo de la que quizás es su mayor victoria en la corta carrera que lleva, el 74° Abierto de Colombia 'Copa Joaquín y Tomás Samper Brush' en el Club Campestre de Cali.

Tan solo una semana después de ser semifinalista en el US Girls' de la USGA, la caleña dominó la categoría de damas aficionadas de principio a fin a pesar de que en la última ronda firmó sobre par.

"Fue una ronda de mucho sube y baja. Empecé con algunos 'bogeys', logré recuperarme y en el hoyo 13 tuve un error, pero logre cerrar con 'birdie' en el 18. No fue una ronda muy buena, pero me voy con la cabeza en alto y muy orgullosa de esta semana", comentó.

Una de sus principales características en el campo es siempre sobrepasar su límite de exigencia, algo que para ella ha sido vital en el crecimiento de los últimos dos años.

Indicó 'Majo' que ese trabajo duro es crucial, "al fin y al cabo esto es golf, y el torneo no acaba hasta que metes la bola en el 18 el último día. Yo siempre me comprometo mucho con los torneos y así tenga un margen amplio me comprometo hasta el final".

Sobre lo que representa en su carrera ganar el Abierto, Marín añadió: "Significa muchísimo. El Abierto de Colombia es el Abierto de mi país y como siempre estoy orgullosa de representarlo de la mejor manera, ganar esto aumenta mi felicidad al mil".

Y cerró hablando de los próximos retos como son la Copa Andes en Brasil y la segunda edición del Women's Amateur Latin America (WALA) al que llega como subcampeona.

"El WALA y la Copa Andes son torneos de mucha exigencia, tengo que seguir trabajando como lo vengo haciendo, muy duro. Siempre hay algo que mejorar en mi juego, reforzar lo que está un poco débil y seguir para adelante".