No es un secreto que el swing de Jon Rahm causa curiosidad por lo corto que es y la capacidad que tiene para golpear la bola a una buena velocidad que lo deja en igualdad de condiciones —a veces con ventaja, incluso— que el resto del 'field' del PGA Tour.

Pues bien, en la rueda de prensa previa al inicio del Open Championship en Royal St. George's (Sandwich, Inglaterra) un periodista le preguntó la razón y sugirió que se podía tratar de un problema en la cadera.

Ram negó rotundamente que se trate por ello y contó la historia de su 'pie equinovaro'.

"Esta es la primera vez que me hacen esta pregunta en un torneo y estoy cansado de escuchar que la razón por la que tengo un swing corto es porque tengo las caderas muy juntas o cosas así. Si sabes de golf, es lo más absurdo que puedes decir. Para quienes no lo sepan, nací con un pie zambo (pie equinovaro), el de la pierna derecha", comentó el oriundo de Barrika (País Vasco).

Y añadió: "He podido mejorar lentamente mi juego con lo que tengo y a aprender a dar diferentes golpes sin tener que cambiar las teclas de mi swing, esa es quizás una de las claves de mi consistencia. No cambiar, jugar con lo que tengo y tratar de hacerlo lo mejor posible".

Pero ¿De qué se trata este problema en el pie derecho de John? Es una deformidad congénita en la cual el pie aparece en punta (equino) y con la planta girada hacia adentro (varo).

"Mi pierna hasta el tobillo estaba recta, pero mi pie estaba girado 90 grados hacia dentro y básicamente de arriba a abajo. Así que cuando nací, me rompieron los huesos del tobillo, me escayolaron de rodilla para abajo cuando apenas llevaba 20 minutos en el mundo y cada semana tenía que ir al hospital, por lo que desde la rodilla hacia abajo mi pierna no creció al mismo ritmo", subrayó el golfista.

Es por ello que la movilidad en esa pierna de Ram es limitada y no le permite hacer el swing completo como regularmente se ve. "Desde mi joven aprendí a ser más eficiente para crear potencia y más consistente con un swing corto [...] si tomo un movimiento paralelo completo sí podría crear más velocidad, pero no tendría estabilidad. Mi tobillo, simplemente, no puede soportarlo. Pero también aprendí muchas cosas haciendo pruebas. Con mi swing, arqueo la muñeca y así es como golpeo. Son pequeñas cosas que mucha gente puede aprender".

No quedan dudas, entonces, del poder de superación de quien fuera número uno del mundo hasta la semana pasada y su capacidad para acomodarse a una situación que no le ha costado en su rendimiento.