Rory Mcilroy no quiere dejar cabos sueltos para enfrentarse a Augusta, en un nuevo intento por completar el ‘Grand Slam’ del golf, con la chaqueta verde, la única pieza que falta en su colección de ‘majors’, por ello cambió su ‘putt’ y su ‘drive’, se enfrentó al renovado campo, jugando 54 hoyos en dos días y salió “muy feliz” con su juego.

El número tres del mundo contó que había ganado distancia, pero su puntería había bajado al 50% con su ‘drive’ anterior, razón por la cual decidió hacer el cambio en su equipo, y tener la oportunidad de ponerlo a prueba justamente en Augusta National fue muy valioso para su preparación: “Es este momento de la temporada en que tienes un ojo en donde estás y el otro en Augusta”.

Si bien corrió el rumor de que había pegado solo 19 ‘putts’ en una de sus rondas, el norirlandés no confirmó ni desmintió la información cuando fue consultado al respecto en rueda de prensa: “Bueno… tuve dos buenos días, jugamos 54 hoyos en dos días, estuvo muy bien y me voy feliz con la dirección que ha tomado mi juego, sabes, algo positivo después de ver lo que padecí en The Players”. 

Al jugador de 33 años también le gustaron los cambios en el hoyo 13 de Augusta: “De hecho es un poco como el 11, en la medida en que hicieron el golpe desde el ’tee’ más fácil, porque no tiene mayor complejidad en ese primer golpe, pero el segundo golpe es mucho más difícil, cuesta seleccionar el palo correcto para llegar al ‘green’ desde ahí, entonces te hace pensar mucho más en el segundo golpe, lo cual creo que es bueno”.