“Todo nuevo comienzo es el final de otro comienzo”, suena la canción de Bon Jovi, y este viernes, cuando Tiger Woods simbolizaba en su atuendo el inicio de una nueva hora, se marcó también el final de una nueva oportunidad en The Riviera Country Club, de donde tuvo que retirarse por enfermedad. 

El jugador de 48 años había sufrido espasmos en la espalda al final de la primera ronda, por lo que se convirtió en la principal hipótesis de la causa de su retiro, del torneo luego de seis hoyos de la segunda ronda. Con el correr de las horas se conoció se se trató de un cuadro gripal con deshidratación.

Los años no pasan en vano; han sido 32 desde que Tiger Woods jugó por primera vez en el PGA Tour, aún como aficionado, justamente en The Genesis Invitational; no obstante, su impacto en la historia del golf es tal que algunos aficionados recuerdan incluso el atuendo que utilizó en el Genesis Invitational de 1992.

Franjas rojas horizontales en la parte del pecho, otras blancas más amplias en la zona abdominal, separadas entre sí por vivos azules, tono que predominaba en los hombros.

Con certeza, Tiger y su nuevo socio de indumentaria —TaylorMade— también lo recuerdan, pues es justamente la inspiración del atuendo de este viernes para del ganador de 82 títulos en el PGA Tour; quizá con el tono azul menos grisáceo respecto al de hace tres décadas, pero conservando la esencia de aquel día que partió el golf en dos.