Una de las decisiones más difíciles para un deportista de alto rendimiento es parar, o saber cuándo parar. El bogotano Marcelo Rozo tuvo que enfrentarse a ella hace unos meses cuando una lesión en su muñeca izquierda comenzó a complicar su juego.

Luego de fuertes dolores al cierre del 2022, Rozo inició con un tratamiento conservador pues tenía "los tendones hinchados y una fisura, así que me aplicaron una inyección biológica que me calmó el dolor, pero el efecto duró poco", indicó en entrevista con Golf Channel Latin America.

Tras eso 'Chelo' se mantuvo al margen y cuando quiso volver a competir en el evento de Mia's Miracle (Fundación de Camilo Villegas y su esposa) las cosas no salieron como esperaba.

"Ahí recaí. Una cosa es la práctica, y luego es muy diferente jugar en el campo con normalidad, donde tienes que exigirte más para hacer otro tipo de tiros. Era imposible jugar con ese dolor, fue terrible".

La situación había llegado al límite por lo que una cirugía era el camino a seguir a pesar de las dudas que generaba en su confianza y pensando en el futuro como golfista profesional.

"Busqué a Camilo (Villegas) y me orientó mucho, él pasó por una situación muy similar, se lesionó por un largo periodo, así que me recargo mucho en su opinión. Él fue muy honesto conmigo y me recomendó que si sentía dolor lo mejor era operarme", agregó Marcelo.

Al bogotano le realizaron una artroscopia y posteriormente una cirugía más compleja pues "encontraron una doble ruptura en los músculos de la muñeca, pero eso no fue todo, porque también me descubrieron una vieja lesión en el codo derecho".

Si bien su recuperación avanza favorablemente, los tiempos parecen muy ajustados para tener una fecha clara de su regreso a los campos: "El pronóstico que hacen los médicos es de 23 a 25 semanas. Ya solicité la ‘medical extension’, aunque todavía no me responden… Pero es casi seguro que no alcance a regresar en este 2023, prefiero hacer una recuperación completa y no asumir riesgos con la salud".

Para finalizar, en medio de todo el agite por su situación física, Rozo tiene una buena noticia y es que será padre de Lorenzo junto a su esposa Manuela. "Verlo crecer durante esos meses va a ser una buena terapia para mí", sentenció.